Han pasado seis semanas desde que los ángeles del Apocalipsis descendieron para destruir el mundo moderno. Las bandas callejeras gobiernan el día, mientras el miedo y la superstición reinan durante la noche. El día en que los ángeles secuestran a su hermana pequeña, Peryn decide que hará cualquier cosa con tal de recuperarla; incluso un trato con el enemigo: Raffe, un ángel al que le han arrancado las alas.
Juntos viajarán hasta la fortaleza de los ángeles de San Francisco, donde Peryn lo arriesgará todo por salvar a su hermana mientras que, Raffe, se pondrá a merced de sus peores enemigos en un intento desesperado de volver a estar completo
La historia está bien, y aunque no tenías muchas expectativas cuando compré el libro, hay algo en él que no me termina de convencer: no tengo muy claro si es que los personajes me parecen un poco planos y estereotipados, o si es que el estilo de la autora no acaba de ser de mi agrado; pero tampoco sé si debería pedirle tanto a la primera entrega de una ¿pentalogía?
Ahora mismo, y con poco más de media novela por delante, espero un buen giro en la trama, o un final de estos que dejan sin aliento. Porque sino, no creo que este libro sea merecedor de todas las alabanzas que está recibiendo.
