Porque un tonto siempre tropieza dos veces con la misma piedra

Y es que es cierto. Por más que tratemos de negarlo, el ser humano tiene tendencia a repetir los errores que cometió en el pasado, a, como se dice, tropezar dos veces con la misma piedra –e incluso más de dos veces en algunas ocasiones. En esta entrada, el tonto soy yo.

La piedra es el NaNoWriMo.

Sí, me he apuntado de nuevo a esta locura iniciativa (que para quien no lo sepa, consiste en escribir una novela, o el primer borrador de ella, en el transcurso de un mes). Sin embargo, la edición de abril es un poco a diferente a aquella en la que participé en noviembre. En el Camp NaNoWriMo el límite de palabras te lo marcas tú, por eso es la excusa perfecta para retomar proyectos inacabados, y eso es lo que pretendo hacer en esta ocasión.

Como ya sabréis si seguís el blog desde hace un tiempo, mi NaNoWriMo de noviembre no fue lo que se dice un «éxito». Tan solo alcancé la mitad del objetivo que me marqué entonces, y lo que obtuve al terminar el mes fue un caos de escenas y capítulos incompletos que tuve que reescribir por completo –en serio, ha salvado muy muy poco del texto original– durante los siguientes meses. También tuve un importante bloqueo creativo que culminó en esta entrada. (Puedes ir a ella en el caso de que te apetezca verme en mi faceta más pesimista).

En noviembre no me demostré que podía escribir un primer borrador en tan solo un mes, pero sí me demostré que era capaz de escribir más de 10 páginas, y que los capítulos que empezaba se podían terminar. Creo que eso fue lo más importante de ese mes, el hecho de darme cuenta de que un poco de trabajo todos los días daba como resultado un buen puñado de páginas. (Porque sí, yo era uno de esos ingenuos que creen que las novelas se escriben perfectas y del tirón –y ni de coña es así–.)

No tengo ni idea de lo que va a pasar este mes. De hecho,  si consigo terminar el primer borrador antes de que llegue el 1 de mayo, puedo darme con un canto en los dientes; pero tengo ganas de intentarlo de nuevo. Independientemente de que gane o no, esto es algo que disfruto mucho, y probablemente no os lo creáis porque a mitad mes estaré suplicando por mi muerte, pero a largo plazo es algo que me gusta y que hago con ganas.

Lo bueno que tiene abril son las vacaciones de Pascua, que combinadas con mucho un poco de café y un horario organizado –sí, me he hecho uno– pueden hacer maravillas en una persona. (O eso he oído).

La actividad del blog –ya de por sí escasa– no cambiará durante este mes, ya que pretendo utilizar las entradas como una distracción del NaNo. También me gustaría traer alguna especia de resumen, pero aún no tengo claro cómo lo haré –no va a ser un vídeo– ni cada cuanto lo haré. ¡Improvisemos! :D

¡Nos leemos pronto! :)

#FridayReads (9): Más números que en una clase de matemáticas

¡Hola a todos!

Escribo esta entrada a contrarreloj porque en una hora (50 minutos aproximadamente) he quedado para hacer un "divertido" trabajo de catalán que me ocupará gran parte del día. Además de que ahora mismo debería estar arreglando mi habitación, pero bueno, eso es un tema aparte...

Vuelve a ser viernes, y yo os traigo otro Friday Reads para que veáis qué lecturas me acompañaran durante este fin de semana. Y en esta ocasión son:

La segunda, la tercera y la cuarta entrega de la saga Los legados de Lorien, una saga de seis libros de los cuales tan solo se han publicado cuatro hasta la fecha de hoy.

Puede parecer mucha lectura, pero los libros no son excesivamente largos (casi todos se encuentran en torno a las 400 páginas) y son muy muy rápidos de leer.

Esta vez os he dejado en la barra lateral derecha una encuesta para que decidáis uno de los libros que leeré en el Friday Reads de la semana que viene (porque sinceramente, yo no tengo ni idea de cuál escoger). Espero que os animéis a participar y así pueda repetirlo de nuevo más adelante.

¿Y vosotros?

¿Qué leéis este fin de semana?

Wrap Up: Febrero 2014

¡Buenas a todos!

Me he retrasado un poco con el Wrap Up de este mes, son consciente de ello. Resulta que cuando iba a montar un collage como el que hice en enero, el ordenador me pedía unas actualizaciones que por lo visto, todavía producen algunos fallos. Así que he tenido que volver a las clásicas fotos (que la verdad, me gustan bastante más.

Febrero ha sido un mes flojo en general, solo he leído 4 libros; pero como he reducido el reto de lectura prácticamente hasta la mitad (por motivos que explicaré en otro momento) pues la verdad es que no estoy muy agobiado.

11. Mil Soles Espléndidos
12. Legend
13. La Ladrona de Libros
14. Angelfall

¿Cómo ha ido vuestro mes?

#FridayReads (8): Un finde con mi amor platónico

¡Hola a todos!

Hacía mucho tiempo que no me pasaba por aquí con esta sección, y ya la echaba de menos. Voy a intentar actualizarla todas las semanas (así de paso actualizo también el blog al menos una vez por semana ^^").

Esta semana solo os traigo un libro, ¡pero menudo libro! Se trata de El camino de los reyes, un tochaco de 1200 páginas, que pesa algo así como un kilo y que pertenece a uno de mis escritores favoritos de todos lo tiempos, Brandon Sanderson. Lo empecé nada más salió a la venta, pero peor algún motivo que desconozco –supongo que pereza y esas cosas– acabé abandonándolo. Sin embargo, hace tanto que no leía nada de este autor, que en esta ocasión lo estoy disfrutando más que un niño con un caramelo interminable; porque para bien o para mal, este libro no se acaba nunca –que llevo desde finales de febrero con él, ¡leñe!

No pretendo acabarlo este fin de semana, ni mucho menos –lo más probable es que este libro aparezca de nuevo la semana que viene– pero sí que me gustaría adelantarlo un poco.

¿Y vosotros?

¿Qué leéis este fin de semana?

Ordenar las estanterías

El otro día estaba tranquilo en mi habitación cuando surgida de la nada, apareció mi madre y me dijo con un tono bastante amenazador: «O te arreglas esta estantería o te juro que no te compras ni un libro más».

Vale, sí, tiene razón, la estantería está hecha una porquería, y lo que un un principio iba a ser un lugar donde dejar los libros se ha convertido en una zona donde abandonar todos mis trastos. ¡Pero está ordenada! Si obviamos esa caja de grageas Bertie Botts, ese póster arrugado, los marcapáginas de Booky, esa púa de guitarra que nunca más volveré a tocar –porque señoras y señores, yo tocaba mal el bajo eléctrico– los tickets de compra, las pelis, las chapas... ¡Los libros están ordenados! ¿Vale? Quedémonos en que dentro del caos que es mi estantería, los libros están ordenados dentro de su propio caos.

Pero aunque estaba más o menos ordenada, comencé a considerar que quizás –y solo quizás– ya había llegado el momento de arreglarla un poco... Y he aquí la pregunta del millón. ¡¿Cómo narices lo hago?!

Se podrían realizar estudios sobre cómo organizar los libros en la estantería. ¿Por colores? ¿Por editoriales? ¿Idiomas? ¿Ediciones? ¿Todos los libros pendiente van juntos en un una pila o los separo? ¿Debería tener un estante con mis favoritos? ¿Y otro para los clásicos? ¿Lo ordeno todo por orden alfabético? ¿Y qué hago con los libros prestados? ¿Y las sagas? ¡No se pueden separar! ¿Las ordeno de izquierda a derecha o de derecha a izquierda? (probablemente escriba una entrada sobre este último tema más adelante).

Y claro, luego vino el problema del espacio. Mi cuarto es bastante pequeñín, y solo tengo una estantería de tamaño medio en la que colocar todos mis libros. Si quería guardar todos mis libros ¡tenía que colocarlos en doble fila! ¿Cómo decidir qué libros van delante y cuáles detrás? ¿Cómo? No hay forma humana de hacerlo –aunque al final no tuve más remedio que aguantarme y ponerlos en doble fila.

Con tantos quebraderos de cabeza no tuve forma de arreglarla. Quité los libros, pasé un trapo para quitar los tres metros de polvo que cubrían los estantes, y volví a colocarlos de la misma forma que estaban.

Ordenados no, pero limpios están un rato; y la furia de mi madre ha sido aplacada durante una temporada. Que al fin y al cabo, es lo que importa.

Reseñas: «El Brillo de las Luciérnagas» y «La Élite»

El Brillo de las Luciérnagas - Paul Pen GR      5/5

El brillo de las luciérnagas es sin duda alguna una de las mejores lecturas con las que me he encontrado en lo que llevamos de año; y aún es pronto, pero creo que va a ir de cabeza a mi lista de mejores lecturas de 2014.
Las trama en sí parece un poco simple al leer la sinopsis; pero el libro tiene varios factores que lo vuelven increíblemente adictivo. Capítulos más o menos cortos, que terminan dejando la historia en suspense y juegan con el «un capítulo más y lo dejo» para atraparte en la historia. Es un libro oscuro, lleno de misterio, con unos personajes complejos a más no poder. Además de unos giros en la trama que resultan completamente inesperados, y que juegan con las pesquisas del propio lector y con su empatía hacia los personajes.
Creo que ese ha sido uno de los mejores puntos de toda la novela, el cómo el autor ha logrado confundirme en todo momento para creer lo que él quería que creyera; ha sido una forma de sumergirse en la novela que no encontraba desde hace mucho tiempo.
Hay novelas buenas, pero es que a esta no le he encontrado un solo fallo. Me ha encantado de principio a fin, en todos los aspectos posibles. En serio, aunque el preció pueda echar un poco hacia atrás, creo esta es una novela más que recomendable.

La Élite (La Selección #2) - Kiera Cass GR      2'5/5

Ya dije que La Selección no me gustó en exceso; y aunque La Élite tampoco ha resultado ser del todo de mi agrado, sí que he de admitir que ha mejorado ligeramente respecto a la primera entrega. Como aspecto positivo, está muy bien que la historia se centre en otros aspectos que aparte del concurso en sí. Parece probable que en la tercera entrega por fin vamos a tener acción, y una historia con el mundo que creó la autora para esta historia; de ser así, puede que la historia mejore muchísimo.
Destacar también que la segunda entrega es tan adictiva como la primera.
Y ahora todo lo malo:
La relación entre los personajes, y el triángulo amoroso –que es en parte lo que sostiene y mueve la historia– no tienen pase. No se puede hablar de amor, pero sí de adolescentes sobrehormonados que cambian de opinión respecto a sus sentimientos como si se tratara de su ropa interior. ¡Horrible! No resultan nada creíbles. Además, algunas escenas –como la de la fiesta de octubre– son un sinsentido metido con calzador en la historia.
Por alguna especie de masoquismo raro, quiero terminar la trilogía, y creo que la tercera entrega aún podría salvar un poco la historia; pero hay muchísimas lecturas mejores que esta.