miércoles, 11 de diciembre de 2013

Reseña: Defy – Sara B. Larson

Defy

Alexa Hollen es una luchadora. Obligada a hacerse pasar por un hombre y a servir en la guardia del rey, Alex hace uso de su inteligencia, su fuerza y su manejo de la espada para ganarse un puesto en la guardia de élite del príncipe; pero cuando un poderoso hechicero logra infiltrarse en el palacio durante la noche, incluso Alex, a quien todos consideran prácticamente invencible, no puede evitar ser secuestrada junto a su compañero de guardia Rylan y el príncipe Damian; viéndose arrastrados a través de la jungla que se extiende a lo largo del reino...

(Y la sinopsis sigue, pero me parecía un spoiler enorme... así que hasta aquí puedo leer xD). – Goodreads (Traducción propia de la sinopsis)


Defy parecía ser una interesante apuesta en lo que a fantasía épica juvenil se refiere. Una chica que se hace pasar por hombre, hechiceros, príncipes... Qué queréis que os diga, tenía muy buena pinta, tenía curiosidad por leerlo... y la curiosidad no solo ha matado al gato, sino que además se ha ensañado de lo lindo con la pobre criatura.

No puedo decir que Defy me ha parecido un libro horrible, porque creo que tiene algunas cosas buenas que de haber sido potenciadas, hubieran hecho de esta novela algo que realmente mereciera la pena. La estética de la novela –y del mundo en general– me ha gustado, me ha parecido un punto de originalidad el hecho de haber situado esta historia en una selva que, gracias a unas buenas descripciones, no he tenido muchos problemas a la hora de imaginar a grandes rasgos. El "a grandes rasgos" es importante, ya que aquí se acaban los puntos a favor de la novela.

El principal fallo que he encontrado es que a la historia le falta profundidad; y puede parecer un detalle poco importante, pero a partir de ese fallo surgen todos los demás. En primer lugar, los reinos en los que transcurre la acción apenas están definidos, al igual que el sistema mágico que se presenta –que en verdad no se presenta nada–. Como ideas base son buenas, pero les falta elaboración; y debido a que Larson no puede tirar de ese hilo para crear una buena historia, decide centrarse en un triángulo amoroso –¡Oh, sorpresa de las sorpresas!– que no se sostiene por ninguno de sus lados.

Los personajes de la novela no me han parecido creíbles en ningún momento de la lectura –precisamente por la falta de profundidad en la historia que ha comentado antes– y es por eso que las relaciones entre los personajes también me han resultado difíciles de creer. Que sí, que todos los personajes se dicen un montón de veces cuantísimo se aman, pero no hay hechos que hagan que esas palabras y ese sentimiento resulten algo creíble ante los ojos del lector.

Y por si todo lo mencionado anteriormente no fuere suficiente, la historia es, además, muy previsible. No exagero si digo que acerté todos los giros en la trama salvo uno –y luego ma pasé horas diciéndome: «¿Pero cómo soy tan mongolo?».

Defy podría haber sido una apuesta muy interesante, pero no ha sabido explotar los numerosos puntos a favor que tenía y se ha centrado en otro triángulo amoroso que además no resulta creíble. No sé si alguna editorial planea traerlo a España, y no sé si me animaré a leer la segunda parte; pero de momento, yo voy a mantenerme alejado de esta autora.


1 // 5


2 comentarios:

  1. Jo :( Parecía interesante, pero me fío de tu opinión y tengo demasiados libros que quiero leer como para perder el tiempo con libros que probablemente no me gusten, la verdad. Y... paso de triángulos amorosos.

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  2. Pues sí que se ha ensañado con el gato... Uno menos.Tampoco me llamaba la verdad...

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